Son parte del decorado de una de las calles más transitadas de la ciudad de La Laguna, Heraclio Sánchez. Ahí llevan desde el año 1986, como parte de un proyecto de dignificación de esta estratégica vía de comunicación entre el casco histórico y el campus central de la Universidad, impulsado por el entonces alcalde Pedro González.

Sus autores son Juan Hernández, fallecido poco tiempo después en un trágico accidente, y Gonzalo González, ambos referentes de la denominada Generación del 70, bandera entonces del arte contemporáneo hecho en Canarias.
El mural de Juan Hernández lleva por título Persiguiendo una estrella para Ely y data de 1977. La obra de Gonzalo González se denomina Claro de luna y es de 1985. El 20 de junio próximo se cumplirán 35 años de su instalación en Heraclio Sánchez. Ambos, de 40 metros cuadrados, presentan hoy un avanzado envejecimiento.
En 2003 fueron retirados para su rehabilitación y traslado, pero fue tal el revuelo que generó el anuncio de su reubicación que, tras repararlos, se decidió devolverlos a su sitio original.
Ahí siguen desde entonces, con el paso del tiempo condicionando cada vez su vistosidad. Descoloridos, tristes, casi imperceptibles a la vista del paseante. Pasados tantos y tantos años de su única cura, quizás ha llevado el momento de volverlos a desempolvar.
Dignificarlos, en definitiva.