Cuando las terrazas tomaron la ciudad. Así podríamos recordar en el futuro este 2021 en La Laguna, seguramente, uno de los lugares con más cafeterías, bares, tascas y restaurantes por metro cuadrado de todo el Archipiélago.
Como consecuencia de las restricciones sanitaria, sus plazas y calles se han llenado de mesas, sillas y parasoles, y hasta sus carreteras y aparcamientos. Una imagen insólita producto de la coyuntura pandémica y las severas limitaciones impuestas al sector servicio, obligado a suspender su actividad en interiores y servir solo en la calle.
Recorremos con imágenes ese paisaje lagunero tomado temporalmente por las terrazas.




Sabíamos que La Laguna era un lugar de amplia oferta de bares y cafeterías. Pero esa certeza nunca había sido tan nítida de comprobar como estos días, con tantas y tantas mesas, sillas y parasoles ocupando el espacio público.
A la administración local no le ha quedado otro remedio que abrir la mano con este tipo de instalaciones.
En tiempos de Covid, mandan las restricciones sanitarias, de modo que para los negocios que no disponen de patio interior, la gran mayoría, la única posibilidad de mantenerse a flote está siendo servir en la calle. En algunos casos, habilitando su servicio de terraza en los lugares de lo más variopintos.
En el mejor de los casos, sobre el asfalto y a solo unos pasos de la circulación de vehículos. En el peor, junto a una hilera de contenedores de basura y reciclaje. Todo sea por no tener que tirar la toalla y cerrar el negocio.
Las calles de La Laguna son estos días un hervidero de gente. Invita el solito de la primavera, las tardes largas y el clásico ambiente lagunero, pero también esa oferta inacabable de terrazeo en la que se ha convertido el centro de la ciudad.



